Los trastornos mentales son más frecuentes de lo que en un principio se podría pensar, y en algunos casos pueden tener consecuencias lo suficientemente graves como para afectar a la capacidad de las personas de llevar una vida normal. A continuación, se presentan cuatro de los trastornos mentales más incapacitantes:
Depresión: entre los trastornos mentales más incapacitantes
La depresión, a grandes rasgos, se caracteriza por un estado anímico de gran tristeza y/o desinterés generalizado, acompañado de una escasa realización de actividades, alteraciones del sueño y del apetito, etc. La depresión es uno de los trastornos mentales más frecuentes, tanto en niños como en adultos, así como uno de los más incapacitantes (causando numerosas bajas laborales) y de los que más sufrimiento causa, tanto a la persona que lo padece como a la gente de su entorno, siendo considerada un trastorno mental grave.
Abuso de alcohol: una conducta con múltiples consecuencias
Aunque el consumo se ha reducido en los últimos años en nuestro país, el alcohol sigue una de las drogas más consumidas. El consumo excesivo de alcohol tiene múltiples consecuencias negativas a nivel individual, familiar, económico, social, etc. Además, tiene efectos directos en el organismo de la persona, entre los que se encuentran daños y trastornos mentales, pues afecta tanto al sistema nervioso en sí mismo como a las funciones que lleva a cabo (atención, pensamiento, memoria, etc.).
Trastorno bipolar: las consecuencias en el estado de ánimo
El trastorno bipolar,
en términos generales, se caracteriza por tener episodios maníacos o hipomaníacos (donde la persona se encuentra en estado de excitación, euforia, irritabilidad) y episodios depresivos (en los que la persona sufre un estado de tristeza y desinterés). El trastorno bipolar es un trastorno mental grave e incapacitante, pues las personas se comportan de manera problemática (no duermen, llevan a cabo conductas arriesgadas, puede haber consumo de drogas, etc.) y sus procesos mentales se ven alterados (dificultades para atender, alteraciones del pensamiento, etc.), lo que causa problemas de adaptación.
Esquizofrenia: el distanciamiento de la realidad
La esquizofrenia es un trastorno mental cuyas características más llamativas son alteraciones del pensamiento y la percepción (delirios y alucinaciones), aunque también se dan comportamiento y lenguaje desorganizado, apatía, aplanamiento emocional, etc. Es un trastorno mental en el que la persona pierde contacto con la realidad, y los síntomas pueden alcanzar tal gravedad que la vida de la persona puede verse muy afectada en todos los ámbitos, mermando su capacidad de adaptación. Por ello, es un trastorno muy grave, además de ser el trastorno psicótico más frecuente.
María Solars
Psicóloga Junior
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